SANTO DOMINGO, República Dominicana.- Ford Motor Company es la primera fábrica automotriz en formular y someter a prueba nuevos componentes de espuma y plástico que utilizan dióxido de carbono como materia prima. Los investigadores esperan ver los nuevos biomateriales en vehículos producidos por Ford dentro de los próximos cinco años.
La espuma es muy prometedora ya que cumple con normas rigurosas de la industria automotriz. Podría emplearse en asientos y aplicaciones bajo el capó, reduciendo potencialmente el uso de petróleo en más de 600 millones de libras por año. Esta espuma derivada del CO2 reducirá aún más el uso de combustibles fósiles en vehículos Ford y aumentará la presencia de espuma sustentable en la línea global de la fábrica automotriz.
“Ford está trabajando agresivamente para disminuir el impacto ambiental mediante la reducción del uso de plástico y espuma a base de petróleo,” señaló Debbie Mielewski, líder técnico y ejecutivo de Ford en sustentabilidad.
Destacó que “esta tecnología es emocionante ya que ayuda a resolver un problema insuperable: el cambio climático. Es un placer para nosotros liderar el cambio hacia la reducción de las emisiones de dióxido de carbono y de los efectos del cambio climático”.
Las emisiones de dióxido de carbono y el cambio climático preocupan cada vez más a los líderes mundiales, ya que en todo el mundo se liberan, increíblemente, 2.4 millones de libras de CO2 a la atmósfera por segundo. La fabricación de plástico representa casi el 4% del uso de petróleo del mundo, según la Federación Británica del Plástico. Los investigadores de Ford confían en que los primeros pasos de la compañía respecto del uso de carbono capturado de maneras innovadoras ayudará a lograr las metas de reducción del calentamiento global a largo plazo que se acaban de establecer en el Acuerdo de París de las NU.
Durante casi dos décadas, los investigadores han trabajado exitosamente para desarrollar materiales sustentables para los productos Ford. En América del Norte, la espuma a base de soja está presente en todos los vehículos Ford. Se utiliza fibra de coco en la parte posterior del revestimiento para maleteros; neumáticos reciclados y soja en las juntas de los espejos; camisetas y tela vaquera reciclada en tapicería; y botellas de plástico recicladas se convierten en tela REPREVE, que se utiliza en la camioneta F-150 2016.
Ford comenzó a trabajar con varias compañías, proveedores y universidades en 2013 en la búsqueda de aplicaciones para el CO2 capturado. Entre ellos está Novomer, empresa con sede en Nueva York, que utiliza dióxido de carbono capturado de plantas de fabricación para producir materiales innovadores. Mediante un sistema de conversiones, Novomer produce un polímero que se puede formular en diversos materiales, incluyendo espuma y plástico, fácilmente reciclables.
“Novomer está muy entusiasmada por el trabajo pionero que Ford acaba de completar con nuestros polioles Converge® a base de CO2”, comentó Peter Shepard, director de negocios de Novomer. “Se necesitan compañías audaces e innovadoras como Ford para permitir que nuevas tecnologías se conviertan en productos de uso generalizado.”
Ford tiene el placer de ser la primera fábrica automotriz de vanguardia en adoptar un camino hacia la reducción de las emisiones de carbono.
“En Ford, estamos desarrollando enérgicamente nuevas formas más sustentables, de fabricar productos de alta calidad, con miras a preservar y mejorar nuestro mundo”, declaró Mielewski.
