MADRID.- La Audiencia Nacional decretó hoy prisión incondicional sin fianza para el exbanquero español Mario Conde, símbolo del enriquecimiento rápido en la España de los ochenta y que acabó en la cárcel, y que está acusado de blanqueo de capitales y organización criminal, entre otros delitos.
El exbanquero español, de 67 años, fue detenido hace dos días junto con dos de sus hijos, por tratar de repatriar a España 13 millones de euros procedentes de los fondos del extinto Banesto, entidad que presidió y cuyo saqueó le llevó a la cárcel durante más de siete años -salió en agosto de 1999-.
La Audiencia Nacional decretó también prisión incondicional para el abogado Francisco Javier Fernández de la Vega, acusado junto con Conde y sus dos hijos de blanqueo, organización criminal, frustración de la ejecución y ocho delitos fiscales.
Para su hija Alejandra Conde, investigada en la misma causa, la justicia española decreta arresto domiciliario, mientras que para su hijo Mario Conde y otros cuatro acusados -Francisco de Asís Cuesta, María Cristina Álvarez Fernández y Roland Stanek- decreta comparecencias semanales en el juzgado, la prohibición de salir de España y la retirada del pasaporte.
La fiscalía anticorrupción solicitó la prisión incondicional por el riesgo de destrucción de pruebas y de fuga del banquero, que en su declaración de hoy negó que los fondos repatriados procedan del ‘caso Banesto’.
Según las investigaciones, Conde repatrió 13 millones de euros (14,8 millones de dólares) saqueados de Banesto desde ocho países distintos desde 1999, a pesar de que se declaró insolvente para hacer frente a las indemnizaciones derivadas de sus condenas e incluso pidió dinero para pagar fianzas para salir de la cárcel.
Todos los detenidos de la operación, conocida como ‘Fénix’ están acusados de blanqueo, organización criminal, frustración de la ejecución y ocho delitos fiscales, y son sospechosos de crear un entramado de empresas en España y otros países destinado a repatriar y blanquear el dinero que Conde se apropió de Banesto.
Al margen de otras deudas, el exbanquero ocupó uno de los primeros lugares de la lista de morosos de la Agencia Tributaria española en 2015, con una deuda con el fisco español de 9,9 millones de euros (11,2 millones de dólares).
