BEIRUT, Siria.- La Coalición Nacional Siria (CNFROS), principal alianza política de la oposición, y 43 facciones armadas rechazaron hoy rotundamente la injerencia de Rusia en cualquier proceso para hallar una solución política al conflicto en Siria.
«Rechazamos total y categóricamente la interferencia de Rusia en el proceso político a través de agresiones militares, extorsión política y su descarado entrometimiento en los asuntos de la delegación de la oposición», indicaron las organizaciones en un comunicado.
La ONU decidirá este fin de semana si retrasa o no el inicio de negociaciones entre el régimen sirio y la oposición en Ginebra, que en principio se espera que comiencen el lunes 25 de enero.
El pasado jueves se anunció en Riad una delegación opositora compuesta por 17 personas, presidida por el general desertor Asad al Zubi, y con el dirigente del rebelde Ejército del Islam, Mohamed Alush, como negociador jefe.
Sin embargo, Moscú no tardó en señalar que en esa delegación han sido incluidos como interlocutores grupos que ellos consideran terroristas, concretamente el Ejército del Islam.
En su nota de hoy, los opositores reafirmaron su apoyo al proceso político, siempre y cuando esté dentro de «los parámetros de los principios de la Revolución Siria».
«Enfatizamos nuestra postura de que los artículos 12 y 13 sobre asuntos humanitarios de la resolución 2254 (2015) del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas deben cumplirse», apuntaron.
Dicha resolución fue adoptada por unanimidad el pasado 18 de diciembre y establece la hoja de ruta para una transición política en Siria, aunque no deja claro el futuro del presidente sirio, Bachar al Asad.
El artículo 12 insta a las partes a permitir el acceso a todas las agencias humanitarias para asistir a la población, sobre todo a aquellas personas que están en áreas asediadas en Siria, mientras que el 13 exige el fin de los ataques indiscriminados a civiles, incluidos los bombardeos y el lanzamiento de proyectiles.
En su texto, la CNFROS y los grupos armados consideraron que el cumplimiento de esos artículos es «un derecho humano básico sin el que es imposible comenzar el proceso negociador».
Atribuyeron, además, a la ONU y la comunidad internacional la responsabilidad de la continuación de los asedios, la hambruna y los bombardeos contra civiles por su «fracaso» a la hora de obligar al régimen a cumplir las resoluciones del Consejo de Seguridad.
Asimismo, agregaron que atribuirán al régimen de Al Asad y a su aliado, Rusia, la responsabilidad de cualquier descalabro del proceso político por «sus crímenes de guerra continuados» y su repulsa a implementar las resoluciones de la ONU sobre la ayuda humanitaria antes del inicio del diálogo.
Aparte de la CNFROS, firman el comunicado facciones como el Ejército del Islam, el Ejército de los Muyahidines, el Frente Sureño, la Legión de Sham, las Brigadas de Al Furqan y distintos batallones del Ejército Libre Sirio (ELS).
Pese a la creación de una delegación negociadora, los opositores sirios aún no han decidido si acudirán a la conferencia de Ginebra, y condicionan su participación al fin de los bombardeos de Rusia y del régimen sirio contra los civiles y al levantamiento de los asedios a varias localidades, entre otros requisitos.
